Una Medusa al platicar…

Vaya toque al hablar, la suavidad de su voz y que rica la cadencia de sus manos al expresar lo que piensa intentando estar en libertad.

Su cabello largo, amazónico, salvaje, hasta cierto punto hipnotizante. Aunque bello, distrae más que el escote de una morenita sudada, así de cruel es su cabello.

Que decir de sus ojos… el lindo toparse en la vida con ojos de luz. Esos que dicen más que las palabras y confunden a cada oración que sus labios pronuncias. Ojos que intentan remendar, sanar, vivir. Qué mirada. Chispa.

Alma aventurera, chispa, alegría con tan corta mecha y sin cerillo. Viajera, con hambre de amar y la responsabilidad de estar para los suyos como así se lo inculcaron. No matter what. Admirable.

Entre su mirada, su voz y su cabello, una Medusa al platicar, paralizante para aquellos sin razón ni sentido.